Eurocopa: Portugal - Francia (1-0)

Portugal ganó a Francia con el solitario gol de �der y se llevó el ansiado título de la Eurocopa. Lo consiguieron pese a la pérdida de su estrella, Cristiano Ronaldo, quien quedó gravemente lesionado en la primera parte del encuentro. El 7, que salió entre lágrimas del campo, tuvo que limitarse a apoyar a sus compañeros desde el banquillo. Eso sí, el capitán pudo levantar la copa.

La selección de Fernando Santos se proclamó campeona de Europa por primera vez en la historia gracias a un gol de �der en la prórroga. Estuvieron cerca de conseguir este título en 2004, cuando Ronaldo solo tenía 19 años, pero una inesperada Grecia se interpuso en su camino a la gloria. Esta vez la suerte se puso del lado de los portugueses. Y eso que parecía que iba a ser una mala noche.

En el minuto 24 Ronaldo se marchó lesionado tras un duro golpe de Payet en la rodilla. El delantero intentó reincorporarse varias veces al partido, negándose a abandonarlo, pero físicamente era imposible. En una de las secuencias más dramáticas que se recuerda en el mundo del fútbol, un lagrimoso Ronaldo dejó el campo tumbado en una camilla mientras se echaba las manos a la cara.

Cristiano no quería irse, no quería creer que fuera verdad, pero entre lágrimas y después de un par de intentos de continuar, no tuvo más remedio que asumir que la final había terminado para él. A partir de este momento, se limitó a animar a sus compañeros desde el banquillo, casi rozando el papel del entrenador de la selección portuguesa. Quién sabe si sus palabras sirvieron para reforzar a los jugadores y alcanzar la victoria.

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