Cristiano Ronaldo sufre una artritis traumática con edema óseo en el astrágalo y un esguince de grado I del ligamento lateral interno del tobillo derecho, según el parte médico colgado en la página web del club, por lo que aún no está descartado para jugar contra el Sevilla en el Sánchez Pizjuán.
El gran protagonista de la victoria del Real Madrid anoche frente al Olympique de Marsella por tres goles a cero se ejercitó esta mañana en el gimnasio tras escuchar la habitual charla de Manuel Pellegrini. Posteriormente se desplazó a la clínica Sanitas La Moraleja para conocer el alcance de su lesión. En torno a las 14:00 horas se fue conduciendo su propio coche sin hacer declaraciones.
"El internacional estará pendiente de evolución y es duda para el partido Sevilla FC", concluye el parte médico.
"Tranquilos, estaré en Sevilla", comentó anoche a sus compañeros el portugués cuando, en el vestuario, le preguntaron por su tobillo derecho, hinchado como una pelota de tenis tras un encontronazo durísimo. Trascendental Cristiano para todo. Dentro y fuera. Y quiere estar dentro el próximo domingo en el Sánchez Pizjuán en una cita que se ha convertido en el primer gran partido del año a medida que el conjunto de Kanouté y compañía se ha ido colgando galones aquí y allá con todos los méritos.
Si se confirma, habrá que llamar a otro brujo antes del sábado. Abandonó cojeando el Bernabéu. "Son cosas que ocurren. Intenté continuar la jugada y evitar el golpe, pero se me vino encima con mucha fuerza. Ahora mismo no sé qué es lo que tengo, pero quiero estar el sábado ante el Sevilla. Es un partido muy importante para el club, pero los madridistas deben saber que si no puedo llegar a tiempo este equipo tiene grandísimos jugadores para ganar allí y en cualquier campo", afirmó con un español que avanza a su velocidad: nueve goles (cinco en Liga y cuatro en Europa). Toda una marca.
La lesión de Cristiano :
