Con la victoria del Arsenal unos minutos antes, el duelo de White Hard Lane tomó mayor importancia pues el United sólo podía ganar si quería conservar su liderato. Los de Juande, dolidos por la eliminación en FA Cup de hace sólo seis días en Old Trafford, quería su particular venganza. El partido arrancó con un ritmo muy lento, sobre todo para lo que ambos equipos acostumbran, por lo que ninguno parecía avisar y todas las acciones se topaban con la fuerza de las defensas, muy bien trabajadas.
El Tottenham buscaba las contras y en una acción que Hargreaves no pudo tapar ante Jenas primero y Lennon después, el extremo llegó a línea de fondo y puso un pase ideal hacia atrás. Van Der Sar tocó pero Berbatov, en boca de gol, sólo tuvo que aprovechar ese despeje. Con la ventaja, los Spurs creyeron aún más en su estrategia y liderados por su buena fuerza defensiva (Hutton y Woodgate debutaban en esa línea), cerraron cualquier avance de un United muy incómodo.
Sin fluidez, Ferguson optó por cambios a falta de media hora y los Anderson y Nani revolucionaron el ritmo. Pese a que la presión local seguía desesperando al campeón, los dos jóvenes recién salidos tuvieron sus opciones con disparos lejanos, así como Tévez. El ‘apache’ en la última jugada del partido, supo remachar en el primer poste un saque de esquina que les premiaba aunque les deja sin liderato.
Resumen del partido:
