Tras unos primeros cinco minutos en los que el Olympique de Lyon intentó dar la sorpresa a un ordenado United, los chicos de Ferguson tomaron el mando del encuentro, la potestad del cuero, y no lo soltaron hasta los últimos diez minutos de juego. El dominio era aplastante por parte de los ‘red devils’. Aún así, el peligro era escaso. Sólo Benzema y Källstrom lo intentaron con tímidos disparos desde lejos en las filas galas. Por parte de los ingleses, Nani, Anderson y Cristiano Ronaldo se mostraron muy incisivos. La situación varió, sin embargo, en el minuto 40. Una vez más fue el prodigioso Ronaldo el protagonista del primer gol de la noche, su trigésimo tanto en 30 encuentros con la camiseta del United.
La acción letal del portugués fue la culminación de una jugada combinada entre su compatriota Nani y el defensa Wes Brown por la derecha, antes de que la pelota pasara al brasileño Anderson y de éste fuera a parar a las botas de Ronaldo quien, de forma magistral, se libró de Clerc y remató la jugada, desde el centro del área de penalti, con un zurdazo que selló la ventaja para el once local.
Cristiano Ronaldo celebrando el gol
El United apretaba, pero el Lyon mantenía la compostura. En ningún momento, el equipo francés dio signo alguno de debilidad. Lejos de ello, el líder galo estuvo cerca de replicar a los "diablos rojos" con un amenazador disparo del brasileño Juninho que logró abortar el meta holandés Edwin Van der Sar.El gol de Ronaldo quitó presión al United que afrontó el segundo tiempo con igual ímpetu, consciente de la necesidad de salvaguardar su ventaja para evitar tener que ir a la prórroga.El Lyon se adueñó del control de la bola durante gran parte de esta mitad. Los hombres de Alain Perrin se lanzaron a por el empate sin descanso, asumiendo riesgos e intentándolo todo para perdurar su estancia en la competición.
El técnico del Lyon introdujo nuevos jugadores para obtener un cambio de guión: reforzó el ataque con dos delanteros (el brasileño Fred y el extremo Keita) en lugar del sueco Kim Kallstrom y Sydney Govou. Al poco de pisar el campo, el suplente Keita tuvo en su poder una notable ocasión de nivelar en el minuto 74, con un disparo desde dentro del área grande, por la derecha, que puso en guardia a las gradas de Old Trafford, aunque finalmente se estrellara contra el poste.
Durante los últimos quince minutos se palpó la tensión con un United empeñado en aferrarse a su billete a cuartos y un Lyon desesperado por quebrar la zaga inglesa con un cuarteto enérgico formado por Fred, Benzema, Ben Arfa y Keita en el ataque.
A pesar de las frías temperaturas que se sufrieron en Manchester a la hora del choque, los jugadores fueron despedidos bajo la ovación de Old Trafford, a sabiendas de que el objetivo de ganar la competición europea de más prestigio aún está latente.
