El Real Madrid regresó a los entrenamientos unas horas después de conquistar su tercer triunfo liguero, ante el Espanyol (3-0). Cristiano no pisó el césped, pero sí el gimnasio. El luso, que sufrió una dura entrada de Galán (entrada que provocó la expulsión del jugador espanyolista) se ejercitó por precaución en el gimnasio. CR7 no sufre lesión alguna. De hecho, se espera que mañana vuelva a entrenarse junto al resto de sus compañeros.